Estas notas, que firman nuestros letrados José Miguel Rivas y Miguel Redruello, pretenden orientar a los profesionales sanitarios sobre las características del proceso de instrucción penal, incluyendo recomendaciones y consejos, como abogados expertos en responsabilidad sanitaria.
La profesión sanitara conlleva una elevada carga de responsabilidad y, por su propia naturaleza, siempre está sometida al escrutinio y valoración por parte de terceros. Por esto, es posible que tanto médicos como otros sanitarios reciban una citación judicial para declarar como investigados en algún momento de su carrera profesional.
Las denuncias más habituales que se presentan en España en el ámbito sanitario lo son por homicidio imprudente profesional, por lesiones imprudentes, por omisión del deber de socorro y, cada vez de manera más frecuente, por descubrimiento y revelación de secretos, derivados de accesos indebidos a la historia clínica.
Es importante recordar que, según establece la jurisprudencia, la medicina curativa es una ciencia de medios, no de resultados. Es decir, no es responsabilidad del sanitario la sanación del paciente enfermo, sino que su obligación consiste en proporcionarle todos los medios y cuidados disponibles para tratar de conseguir su curación.
La presentación de una denuncia NO significa que el denunciado haya cometido un delito
Nuestro sistema legal dispone que, tras la presentación de una denuncia o querella, el profesional sanitario al que se imputan los hechos delictivos tenga derecho a dar su versión de lo ocurrido. Y para mayores garantías del proceso, esto se hace a través de la figura del investigado.
El investigado tiene una serie de derechos, entre los que destacamos:
• Ser informado de los hechos que se le imputan
• Examinar las actuaciones con la debida antelación para salvaguardar el derecho de defensa
• Designar libremente abogado
• Solicitar asistencia jurídica gratuita
• Solicitar traducción e interpretación gratuitas
• Guardar silencio y no prestar declaración si no desea hacerlo
• No declarar contra sí mismo ni confesarse culpable
Es fundamental saber cuáles son los hechos que se imputan para conocer cuál es la actuación concreta que se supone delictiva y poder plantear, cuanto antes, la mejor estrategia de defensa.
La citación judicial para declarar como investigado NO es una citación para ir a juicio
Recibir una citación judicial como investigado no implica ser citado a juicio, sino que se está desarrollando una fase anterior, denominada “de instrucción”, cuyo propósito es la investigación de los hechos denunciados. El objetivo de este procedimiento es que el juez tenga los elementos necesarios para poder llegar a la conclusión de si existen o no, indicios sobre la posible comisión de un delito.
Las declaraciones que se realizan en calidad de investigado suelen tener lugar en las salas de vistas de los juzgados, pero ello no significa que ya se esté celebrando el juicio. Las salas de los juzgados tienen instalados sistemas de grabación, lo cual confiere mayor garantía a la declaración, evitando la necesidad de transcripciones posteriores (una práctica que, por suerte, está en desuso).
Por lo general, el Juez realiza una serie de preguntas al investigado sobre su filiación, categoría profesional, puesto de trabajo y sus competencias, así como sobre los hechos que se han denunciado para, a continuación, pasar el turno de preguntas al abogado del denunciante y, en su caso, al Ministerio Fiscal. Finalmente, será el abogado defensor del profesional sanitario quien tendrá la oportunidad de realizar las preguntas que considere necesarias.
La citación judicial como testigo
Es muy importante contar con el asesoramiento de un abogado con carácter previo a acudir al juzgado a prestar declaración como testigo, pues el profesional citado, si hubiera tenido participación directa en los hechos, podría pasar a ser considerado como investigado si la autoridad competente así lo considera.
Diligencias imprescindibles en la instrucción penal
Con posterioridad a la declaración se realizarán más diligencias a instancia del juzgado o de las partes. Estas son algunas de las más importantes:
• Ratificación de la denuncia o querella por parte de los perjudicados y ofrecimiento de acciones.
• Declaración de otros posibles investigados.
• Declaraciones testificales.
• Solicitud de la Historia Clínica o documentos de interés para el caso.
• En supuestos de praxis médica y de lesiones: solicitud de informe forense sobre la praxis médica valoración del daño corporal y su relación de causalidad con la actuación que se investiga.
¿Cuánto durará el procedimiento?
Según establece la Ley, los procedimientos de instrucción deben desarrollarse en un plazo máximo de 12 meses, aunque pueden ampliarse mediante sucesivas prórrogas de hasta 6 meses.
En la práctica, es habitual que transcurra un tiempo considerable hasta que se determine si un caso en cuestión se archiva o sigue adelante, por lo que es recomendable armarse de paciencia.
Será el abogado del investigado quien irá informando al investigado de todas las novedades que se vayan produciendo.
En caso de recibir una denuncia penal es muy importante contar con asesoramiento jurídico especializado lo antes posible
Ante la llegada de una citación judicial es importante comunicarlo a la compañía aseguradora con la que se ha contratado la póliza de Responsabilidad Civil Sanitaria y en caso de trabajar en un servicio de salud público, también a la Asesoría Jurídica del centro u hospital.
Una vez realizada esta comunicación se activan las garantías de la póliza, que incluye la defensa jurídica, designando un abogado que brindará su asesoramiento y ejercerá la defensa durante todo el proceso. Será este letrado quien se encargará de obtener la copia íntegra de los autos, incluida la denuncia completa, siendo ello fundamental para preparar adecuadamente la defensa y valorar en su caso, la necesidad de solicitar diligencias.
Sobre la importancia de contar con la asistencia de un abogado especializado
Existen multitud de especialidades médicas y lo mismo ocurre en el ámbito de la abogacía.
Ante el supuesto de que se discuta la actuación de un sanitario desde una perspectiva penal, resulta crucial que el abogado esté especializado en Derecho Penal y en Derecho Sanitario, porque sus conocimientos en la materia, en la terminología y en los procesos médicos le capacitan técnicamente para realizar su trabajo de forma más efectiva que un letrado dedicado habitualmente a otras cuestiones.
Si eres un profesional sanitario y has recibido una citación judicial para declarar como investigado, ponte cuanto antes en contacto con un abogado especializado.
Los autores de estas notas son letrados del equipo de MBE Legal: José Miguel Rivas y Miguel Redruello